Sri Lanka es conocida como «la isla de los mil nombres». Y es que muchos han querido dar el mejor nombre por su belleza natural y por la amabilidad de sus gentes. Se dice que el explorador Morco Polo se enamoró de ella en uno su viaje de China a Sumatra, dijo de ella que era la isla “más bonita del mundo”. Y es que todo el que la visita quiere volver, enamora al primer instante.

Sri Lanka es uno de esos lugares que enamora en cuanto lo conoces, su increíble naturaleza, la amabilidad de sus habitantes y su rico patrimonio cultural atrapa al visitante

Este maravilloso lugar, Sri Lanka, es conocido como “La lágrima de la India”. Ha sido una perfecta desconocida para muchos viajeros, pero los que la han recorrido y se han adentrado en su cultura siempre regresan. Sus playas salvajes, sus rutas de senderismo, ciudades coloniales, paisajes montañosos, una flora y fauna sorprendentes, … enamoran a quienes la visitan.

La ciudad de Polonnaruwa fue su capital hasta el siglo XIII y es uno de los lugares más visitados del país. Esta ciudad junto con las de Anaradhapura y Sigiriya han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sus increíbles yacimientos arqueológicos se encuentran en un estado de conservación excepcional. Destacan las esculturas de los Budas de Gal Vihara, tres budas tallados en la roca mostrando distintas posiciones.

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En la Zona de Tierras Altas encontramos el pueblo de Ella. Sin duda es uno de los mejores sitios de Sri Lanka. Sus paisajes de montaña parecen irreales. Desde aquí parten distintas rutas de senderismo. También se puede tomar el tren que va a Ella Rock. El trayecto transcurre entre una maravillosa vegetación y paisajes que nos dejarán sin aliento.

En este país la naturaleza tiene su lugar. Sus Parques Nacionales ofrecen la posibilidad de observar y disfrutar de momentos únicos. Aquí los animales viven en libertad, como los elefantes. Destaca el Parque de Minneriya.

La ciudad Patrimonio de la Humanidad de Sigiriya ofrece uno de los yacimientos arqueológicos más impresionantes del país. En una roca volcánica de más de 400 metros de altura encontraremos los restos del Palacio del Rey Kasyapa. La subida se hace por unas escaleras cuya entrada está flanqueada por dos garras de león esculpidas en piedra.

Este maravilloso país ofrece muchos más: playas salvajes de ensueño, antiguas ciudades, yacimientos únicos, …, por eso y mucho más, quien la conoce quiere volver.

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