La República de San Marino es el estado soberano más antiguo del mundo. En el año 1600 publicó su constitución, aunque la fundación oficial de la ciudad fue en septiembre del 301. Además, está enclavado en lo más alto de los Montes Apeninos, es el mejor mirador a la costa italiana. A pesar de ser un pequeño estado, 62 kilómetros cuadrados, ofrece muchos rincones naturales e históricos.
La República de San Marino es uno de los estados soberanos más antiguos del mundo, rodeado de territorio italiano
Este pequeño estado se encuentra en Italia, a menos de 10 kilómetros del mar Adriático. Rodeado de territorio italiano, no ha perdido ni su independencia ni su esencia. Su ubicación, en las laderas del Monte Titano, hace que sus vías sean empinadas. No obstante, vale la pena visitarla y conocer su maravilloso patrimonio histórico.
El emblema del país y sus construcciones más importantes son las Tres Torres. Estas edificaciones son fortificaciones ubicadas en tres picos del monte. Estas atalayas se llaman Guaita, Cesta y Montale. La Torre más alta es La Guaita, han superado muchos conflictos bélicos, como la Segunda Guerra Mundial.
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La Plaza de la Libertad sorprende al visitante. Este emblema de San Marino, parece más un mirador. En ella están los edificios más importantes del Estado, la sede del gobierno (El Palazzo Publico) y la Secretaria de Asuntos Interiores (El Parva Domus), ambos son del siglo XV. Además, en medio está su Estatua de la Libertad, esculpida en mármol de Carrara.
Igualmente, es visita obligada la Basílica dedicada a su patrón y fundador del Estado, San Marino. Ha sido construido en estilo neoclásico y destacan sus 16 columnas de estilo corintio. Su caso histórico invita al paseo. Es totalmente peatonal. Aun se puede respirar su aire medieval. Además, este paseo nos llevará hasta el teleférico que conecta esta zona con el bonito castillo Borgo Maggiore.
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