La Ruta de las Flores de El Salvador es una de las mejores formas de conocer más en profundidad este magnífico país. Situada en la zona occidental, en la Cordillera Apanea-Ilamatepec, es famosa por sus maravillosos paisajes, bonitos pueblos y la explosión de color de sus flores.

Recorrer la Ruta de las Flores de El Salvador nos permite conocer más en profundidad su cultura, historia y su entorno natural único

Esta colorida ruta nació gracias a varios empresarios de la zona. En 1990 para promover el turismo y dar a conocer esta zona, que por aquel entonces no era muy frecuentada por turistas, se decidió crear esta impresionante ruta de 36 kilómetros y que nos lleva por pintorescos pueblos.

Lo más destacado de esta ruta son sus impresionantes panorámicas y la explosión de color de su variedad de flores. Durante el recorrido se puede disfrutar de campos llenos de flores que desprenden un aroma único. No cabe duda que vale la pena realizar este sendero y empaparse de la naturaleza y la cultura de la zona.

El sendero nos lleva por seis pueblos únicos, con una cultura y costumbres que no nos debemos perder

Ahuachapán es una pequeña ciudad que guarda un inmenso tesoro, La Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Además, es zona de cafetales. Una curiosidad natural que no nos podemos perder son los Ausoles, que son emanaciones de vapor que vienen de las entrañas de la tierra.

La localidad de Concepción de Ataco destaca por su rica gastronomía, por su elaborada artesanía y por sus manantiales. A 1260 metros sobre el nivel del mar, aquí la tierra es fértil, con manantiales que riegan sus plantaciones.

Apaneca es famosa por la calidad del café, sus hoteles con encanto y sus dos lagunas (Las Ninfas y Laguna Verde), ideales para disfrutar de algunos de sus restaurantes. En sus plantaciones de café se pueden admirar las famosas esculturas de los Gordinflones.

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El pueblo de Juayúa posee unos viveros de plantas ornamentales increíbles. El ecoturismo tiene aquí su espacio. Al Igual que en el resto de la ruta, la gastronomía es única.

Salcoatitán es una localidad que se debe recorrer para visitar alguna de sus importantes galerías de arte regional. Los distintos objetos de su cultura y los ricos colores con los que están decorados nos enamorarán.

Por último está el bonito pueblo de Nahuizalco. Esta localidad tiene el único mercado abierto durante la noche. Aquí se pueden encontrar puestos de artesanía y gastronomía. Además, para conocer más en profundidad el pueblo indígena salvadoreño se debe visitar el Museo Conmemorativo de Pipil.

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Imagen de Portada: Ectours El Salvador

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