Ayutthaya, situada a unos 80 kilómetros al norte de Bangkok, es una ciudad que encarna el esplendor del antiguo Reino de Siam. Fundada en 1350, Ayutthaya fue una de las ciudades más prósperas de Asia durante los siglos XIV al XVIII y sirvió como la capital del reino hasta su destrucción en 1767 por el ejército birmano. Hoy en día, sus ruinas forman parte del Parque Histórico de Ayutthaya, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1991, un lugar fascinante para los amantes de la historia y la cultura.
Ayutthaya, situada muy cerca de Bangkok, es una antigua ciudad que respira historia y cultura a cada paso, un lugar donde viajar al pasado
El parque está compuesto por impresionantes templos, estatuas de Buda y estructuras arquitectónicas que reflejan la fusión de influencias tailandesas, khmer, persas y portuguesas. Uno de los sitios más destacados es el Wat Mahathat, famoso por la icónica cabeza de Buda entrelazada en las raíces de un árbol. Este símbolo se ha convertido en una de las imágenes más representativas de Ayutthaya y un punto obligado para los visitantes.
Otro lugar imperdible es el Wat Phra Si Sanphet, que fue el templo más importante de la ciudad y un símbolo del poder real. Sus tres chedis (o estupas) dorados, que albergan las cenizas de antiguos reyes, son un reflejo del esplendor de la antigua capital.
El Wat Chaiwatthanaram, ubicado a orillas del río Chao Phraya, destaca por su imponente arquitectura de estilo jemer. Este templo es especialmente bello durante el atardecer, cuando sus torres y galerías reflejan los cálidos tonos del sol.
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Además de sus templos, Ayutthaya también ofrece una rica tradición cultural. Los mercados locales, como el Mercado Flotante de Ayutthaya, permiten a los visitantes disfrutar de la cocina tailandesa auténtica, como el famoso kuay tiao ruea, una sopa de fideos conocida como “sopa de barco”.
Para explorar Ayutthaya, se puede recorrer en bicicleta, a pie o incluso en barco a través de sus canales y ríos. Esta experiencia permite apreciar tanto su importancia histórica como la belleza natural que la rodea.
Ayutthaya es un destino que transporta a los viajeros al pasado glorioso de Tailandia, con su rica herencia cultural y su atmósfera serena. Es un recordatorio vivo de la grandeza de Siam, y un lugar imprescindible para quienes buscan conectar con la historia y la espiritualidad de esta región.
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